Todos somos conscientes que, si no nos tomamos el tiempo necesario para descansar, recuperarnos y relajarnos, seremos propensos a sufrir estrés, depresión, ansiedad y enfermedades. Sin embargo, es sorprendente que a pesar de que estamos rodeados de un mundo de conveniencia, todavía nos falta el tiempo para recuperarnos de las horas dedicadas a trabajar. Por ese motivo, hoy queremos hablar sobre la meditación en el trabajo.
¿Por qué no aprovechamos momentos para relajarnos?
No es difícil de entender. La mayoría de las personas trabajan al menos ocho horas al día. Súmale el tiempo dedicado a prepararte para el trabajo y al viaje de ida y vuelta, y la mayor parte de tu día ya está perdido. Algunos de nosotros también tenemos familias que cuidar, y nuestro tiempo de “inactividad” lo pasamos cocinando, limpiando o persiguiendo a los niños pequeños por la casa. ¿Qué pasa con las compras del hogar y las reuniones, o las citas personales obligatorias? Tal vez estudies o trabajes en más de un trabajo ... La lista de cosas que nos impiden relajarnos podría ser infinita. Entonces, cuando tenemos un rato libre, creemos que debemos aprovecharlo saliendo con los amigos, yendo al cine, comiendo fuera de casa… pero quizás eso no es lo que necesitas.
Debes de saber que hay una gran diferencia entre desahogarse y relajarse. Desahogarse es algo temporal y, aunque te siente bien, no tiene beneficios para la salud. Sin embargo, relajarse se puede practicar a largo plazo y conlleva efectos positivos y duraderos para la salud.
Como puede ayudarte la meditación en el trabajo
La meditación y el trabajo pueden parecer dos cosas totalmente opuestas, pero cuando se combinan, los resultadosson inmensamente positivos La meditación no solo influirá en cómo te sientes, sino también en cómo trabajas.
La investigación que prueba los beneficios físicos y psicológicos de la meditaciónes interminable, pero existen algunos beneficios para la meditación que se aplican directamente a tu trabajo, como: reducir el estrés, mejorar tus habilidades, mejorar tu creatividad, aumentar tu felicidad y hacer crecer tus perspectivas.
¡Puedes meditar en el trabajo!
Imaginarte asumiendo la posición de Lotus en tu mesa de trabajo puede hacerte reír, pero la verdad es que la meditación no tiene que ser un ejercicio físico. Para ejercer el poder de la meditación en el trabajo, no necesitas nada más que tu mente. No tienes que cambiarte de ropa, sudar o llamar la atención porque hay meditaciones simples que puedes hacer con la máxima discreción.
Meditación Zen
La meditación Zen combina la postura correcta y la respiración con despejar la mente de los pensamientos dañinos, y puedes practicarla justo donde te sientas.
- Asegúrate de que tu espalda esté derecha y recta
- Concéntrate en el suelo frente a ti
- Mantén la boca bien cerrada
- Respira por la nariz
- Toma respiraciones lentas y constantes
- Despeja tus pensamientos, enfocándote solo en tu respiración
Esta es una gran meditación que puedes probar antes de comenzar a trabajar o durante la pausa para el almuerzo, cuando no te molesten.
Mindfullness
El Mindfullness es fantástico porque, en lugar de bloquear los pensamientos, el objetivo es experimentar todo al máximo para aumentar la conciencia en lugar de desperdiciar energías. Es muy relajante. Puedes probarlo con absolutamente todo y realizar esta meditación en el trabajo.
Concéntrate en la oficina que te rodea. Diferencia los sonidos y los olores. ¿Cuál es la temperatura de la habitación? ¿Cómo se siente tu ropa? ¿Cómo se ve y se siente tu escritorio? Puedes tener a mano un cuaderno para registrar las cosas que nunca te has molestado en notar antes: te sorprenderás de la cantidad de información que ignoramos durante el día.
Tu comportamiento se ajustará y te volverás más amable, más tranquilo y más relajado.
Meditación Mantra
Elige una frase poderosa, o pídele a alguien de tu confianza que te asigne una, y repítela tu mismo (verbal o mentalmente) cuando necesites centrarte.
Aunque la meditación mantra también se incorpora a la meditación física, no hay una forma incorrecta de usar un mantra. Mientras creas que todo lo que te estás diciendo tiene poder, sentirás los efectos de tu mantra. La mejor parte es que puedes decir (o pensar) lo que quieras y puedes realizar esta meditación en el trabajo.
Prueba algo simple como "Soy increíble", algo decidido como "Cumpliré con mi fecha límite", algo espiritual como una frase de la Biblia, o incluso puede ser un sonido, como un zumbido.
Meditación Qigong
Se traduce como "cultivo de energía vital", y relaja tanto el cuerpo como la mente. Te enseñamos como llevar a cabo este tipo de meditación en el trabajo:
- Siéntate en una posición cómoda (¡cuidado con tu postura! ;))
- Despeja tu mente lo mejor que puedas
- Relaja tus músculos
- Regula tus respiraciones. Mantenlas firmes y controladas
- Imagina una energía de flujo en tu centro (justo encima de tu ombligo)
- Imagina esta energía corriendo por las venas, calmando tus nervios, rejuveneciendo tus respiraciones, calentando tu piel, desde la punta de los dedos de los pies hasta la parte superior de la cabeza.
Disfruta de los beneficios de la meditación en el trabajo
Al final del día, no importa qué técnica de meditación en el trabajo elijas, siempre que funcione para ti. Independientemente del método, lo importante a tener en cuenta es que cuando te tomas estos pocos minutos para meditar, debes concentrarte en los efectos calmantes que tendrá en tu cuerpo y alma. Con la práctica, los beneficios no serán difíciles de ignorar y pronto se convertirán en tu rutina. Puedes ampliar más información en nuestro post de Aprende a meditar, en el que encontrarás una guía para principiantes.