Autocontrol emocional: técnicas y beneficios

¿Cuántas veces hemos oído que las emociones son incontrolables?

Aunque el origen de las emociones es espontáneo y en la mayoría de ocasiones, totalmente inevitable, el autocontrol es una habilidad con la que podemos mejorar nuestra forma de reaccionar.

Sin embargo, debemos tener claro que el autocontrol emocional no trata en absoluto de reprimir las emociones. De hecho, su labor principal consiste en buscar el propio bienestar, ayudándonos a tomar decisiones más adecuadas, mejorando nuestra claridad mental e incrementando la autoestima.

¿Por qué es tan necesario el autocontrol emocional?

Sin duda, los conflictos con otras personas ponen a prueba nuestro propio control emocional. Una de las respuestas más comunes ante estas situaciones es soltarle al individuo en cuestión toda una sarta de infortunios sin pensar muy bien en cuáles serán las consecuencias.

¿Nunca te has arrepentido de una reacción desmesurada después de dejar pasar unas pocas horas? Esto ocurre porque cuando reposamos nuestras emociones, damos tiempo a la parte racional del cerebro a analizar la situación en cuestión, y en la mayoría de ocasiones, nos damos cuenta no solo de que el problema en sí no era para tanto, sino que nuestra reacción estaba totalmente fuera de lugar.

Pero si crees que el descontrol emocional tan solo ocurre con las emociones que sentimos como negativas, como sería el caso del enfado, estás muy equivocado.

De hecho, los niños, por su inmadurez emocional, tienden a tener un alto descontrol ante muchas situaciones, tanto positivas como negativas.

Basta con fijarse en su comportamiento en las tiendas de juguetes, paseando por un increíble parque de atracciones o en la cola para ver a Papá Noel. Aunque algunos se mantienen más o menos tranquilos, habrá muchos de ellos tan exaltados por sus propias emociones de felicidad, que apenas podrán estarse quietos en un mismo lugar.

Cómo controlar nuestras propias emociones

Como ya estarás imaginando, el autocontrol es vital para mantener nuestras emociones a raya, cultivando unas relaciones mucho más sanas tanto a nivel laboral como profesional. De hecho, mejorar en autocontrol implica mejorar nuestra propia inteligencia emocional.

Cuando una situación en concreto nos supera emocionalmente, normalmente reacciona la parte más primitiva del cerebro, encargada precisamente de procesar todos estos escenarios desde su vértice más emocional.

Estas técnicas que presentaremos a continuación tratarán, precisamente, de ayudarnos a controlar nuestra parte más emocional, dando tiempo a la parte racional a analizar la situación y preparar una reacción más controlado y menos vehemente.

Técnica de respiración

Se trata sin duda de la técnica más efectiva ante una emoción relacionada con la ira o el enfado.

El primer paso para aplicar esta técnica trata de reconocer la emoción y aceptarla. Seguidamente, intentaremos relajarnos e inhalar lo máximo posible hasta que nos sintamos totalmente llenos. Después, exhalaremos todo el aire de nuestro interior hasta quedar vacíos por completo.

Repetiremos la acción varias veces, intentado que cada repetición sea un poco más natural y menos forzada hasta volver a nuestro ritmo de respiración natural.

Ensayo mental

Se trata de una técnica muy útil para enfrentarnos a situaciones que de antemano, ya sabemos que nos van a incomodar o afectar de manera emocional. Esta técnica consiste en imaginarse esta situación incómoda y nuestra posible reacción.

El truco consiste en imaginar dicha situación varias veces, figurando cada vez una reacción más equilibrada y controlada. De esta forma, nuestro sistema límbico estará preparado cuando se enfrente en la vida real a dicha situación.

Empatía

Esta habilidad social es una excelente herramienta que nos permite entender las emociones ajenas, ayudándonos a comprender el porqué hay personas que actúan de manera errónea a nuestro parecer. De esta forma, al analizar qué es exactamente lo que nos incomoda de su comportamiento, entendiendo sus razones y motivaciones, es muy probable que esta emoción que no nos gusta se vuelva menos intensa e incluso, que desaparezca por completo.

Detener el pensamiento

Esta técnica es muy efectiva cuando nuestra mente inquieta entra en un bucle de pensamientos y emociones negativas del que no puede salir. Esto ocurre porque el pensamiento negativo tiende a retroalimentarse a sí mismo, convirtiendo un grano de arena en una enorme montaña y haciendo que los problemas parezcan mucho más grandes de lo que en realidad son. Cuando esto ocurra, lo mejor es parar en seco este incesante bucle de emociones, diciéndonos a nosotros mismos ’basta’, cortando así el flujo de pensamientos de raíz.

Relajate con una experiencia en AIRE Ancient Baths

Gracias a estas técnicas adquirirás más conciencia de tus emociones, conseguirás mejorar tus relaciones y por lo tanto expresarte, con comodidad y objetividad. Muchas veces es necesario un pequeño impulso para poder llegar a esa relajación extrema, para vivir la vida más pausada, ya sea prácticando algún ejercicio como el yoga, la meditación o simplemente acudiendo a un centro AIRE Ancient Baths para cuidar tu cuerpo pero también tu mente. Nuestros tratamientos y rituales están pensados para que vivas una experiencia de lo más completa con tus 5 sentidos. Ya no tienes excusas para equilibrar tu cuerpo y mente.

Compartir





Share