beneficios de la meditación son muy variados y su práctica puede ayudarnos en numerosas ocasiones. Gracias a la meditación logramos relajarnos, pues no consiste en concentrarse o enfocarse en los pensamientos. Más bien todo lo contrario. Se trata de soltar y dejar ir la mente, de lograr tranquilidad.
Los efectos fisiológicos de practicar la meditación en nuestro organismo son muy concretos. Además, cada vez hay más estudios clínicos y científicos que avalan la existencia de dichos efectos.
La ventaja de la meditación es que puedes practicar muchas formas diferentes y que la mayoría no requieren de un equipo especializado ni de demasiado espacio. Para practicarlo sólo necesitas unos minutos al día.
Si aún no te has iniciado en esta práctica pero quieres comenzar, puedes elegir la meditación que mejor se adapte al objetivo que quieres conseguir.
Beneficios de la meditación
Mejora de la salud emocional y aumento de la felicidad
La meditación puede ayudar a mejorar la imagen que tenemos de nosotros mismos y aportarnos una visión de la vida más positiva.
El estrés produce marcadas modificaciones en la liberación de múltiples citocinas (también denominadas citoquinas), que son proteínas moduladoras, lo que puede llevar a la depresión. Según varios estudios, la meditación reduciría la depresión al disminuir la cantidad de citocinas liberadas.
Algunas formas de meditación pueden generar cambios apreciables en nuestro pensamiento, mejorando los síntomas de depresión y aumentando el optimismo y, por tanto, también contribuye a aumentar la felicidad. Estos beneficios de la meditación pueden mantenerse a largo plazo mediante su práctica continuada.
Aumento de la conciencia personal
A través de la meditación se puede desarrollar una comprensión más profunda de nosotros mismos, ayudándonos a conseguir una mejor versión de nosotros.
Un ejemplo de ello es la meditación de auto-indagación, cuyo objetivo es ayudarnos a conseguir precisamente eso, una mayor comprensión de nosotros mismos y también saber cómo nos relacionamos con los que nos rodean. A partir de esa mejor conciencia de nosotros mismos podremos propiciar otros cambios positivos.
El objetivo de algunas formas de meditación consiste en reconocer pensamientos que puedan ser perjudiciales o autodestructivos. A medida que se fuese adquiriendo mayor conciencia sobre nuestros propios hábitos de pensamiento, podremos controlarlos y conducirlos hacia reflexiones más constructivas.
Además, cuanto más se realice la práctica de la meditación más fácil será llegar a generar soluciones creativas a nuestros problemas.
Desarrollo de la inteligencia emocional y la empatía
Otro beneficio de la meditación es que también puede aumentar la existencia de sentimientos y acciones positivas hacia nosotros mismos y los demás.
La meditación Metta o del amor benevolente, se basa en propiciar el desarrollo de pensamientos y sentimientos amables hacia nosotros mismos. A partir de esta práctica, las personas comienzan a aplicar esa bondad hacia los demás, empezando con sus seres queridos para luego seguir con los conocidos y terminar, finalmente, con los enemigos.
Los sentimientos positivos que se alcanzan a través de la meditación Metta pueden ayudar a mejorar la ansiedad social, disminuir las peleas conyugales y ayudar a controlar la ira.
La positividad, la empatía y bondad con los demás pueden mantenerse también en el tiempo con la práctica continuada de la meditación Metta.
Mejora de la memoria
Si se logra mejorar la atención y la claridad del pensamiento, se puede ayudar a conservar la mente joven.
La meditación Kirtan Kriya combina un mantra con un movimiento repetitivo de los dedos que busca concentrar los pensamientos. Este método ayuda a mejorar la capacidad de quienes lo practican para aumentar la atención, la rapidez mental y la memoria.
Este tipo de meditación lucha contra la pérdida normal de memoria relacionada con la edad y ayuda a mejorar parcialmente la memoria en pacientes con primeros síntomas de demencia.
Alivio del estrés
La reducción del estrés es, probablemente, uno de los beneficios de la meditación principales por el que las personas comienzan a practicarla. Actualmente existen muchos estilos de meditación que pueden ayudar a reducir el estrés.
Por lo general, el estrés mental y físico provocan un aumento de los niveles de la hormona cortisol. Esto produce a su vez muchos efectos nocivos como la liberación de las citocinas que generan la inflamación.
Como consecuencia se puede producir la interrupción del sueño, el aumento de la depresión, la ansiedad y de la presión arterial. Además, contribuye a la aparición del pensamiento nublado y la fatiga.
La respuesta inflamatoria causada por el estrés puede ser reducida por la meditación guiada.
La meditación también podría mejorar el síndrome del intestino irritable, el trastorno de estrés postraumático y la fibromialgia.
Alivio de la ansiedad y la depresión
Gracias a la reducción del estrés se disminuye también la ansiedad.
La meditación también puede reducir la ansiedad y los problemas de salud mental relacionados con ella, como la ansiedad social, comportamientos obsesivo-compulsivos, pensamientos paranoicos y ataques de pánico.
Además, puede ayudar a controlar la ansiedad relacionada con el trabajo que se desarrolla en ambientes de mucha presión.
Diferentes estrategias de meditación pueden ayudar a reducir los niveles de ansiedad. Por ejemplo, el yoga, que combina la práctica de la meditación y la actividad física, ayuda a reducir la ansiedad.
Reducción de la presión sanguínea
Otro beneficio de la meditación es que puede contribuir a reducir la tensión en el corazón y, por tanto, a mejorar la salud física.
Al corazón le puede costar más bombear sangre debido a la presión arterial alta, lo que puede desencadenar en el mal funcionamiento del corazón.
Como consecuencia de la presión arterial alta puede producirse la formación de aterosclerosis o el estrechamiento de las arterias, lo que puede degenerar en ataques al corazón y accidentes cerebrovasculares.
La meditación puede ayudar a controlar la presión sanguínea ya que relaja las señales nerviosas que coordinan la función cardíaca, la tensión en los vasos sanguíneos y la respuesta de nuestro organismo ante situaciones de estrés.
La presión arterial va disminuyendo a medida que se practica la meditación. También ayuda a prevenir las enfermedades del corazón.
Si te ha convencido este artículo, puedes consultar en el que explicamos cómo encontrar tu paz interior.
