Que las familias traten de reducir el estrés típico de la sociedad actual es cada vez más habitual. El estrés no sólo afecta a los padres y madres que deben conciliar su vida laboral y personal, sino que también puede afectar a sus hijos que cada vez van adquiriendo nuevas responsabilidades y que irán enfrentándose a nuevos retos y experiencias.
Al llegar a casa tras un largo y duro día de trabajo, nuestro nivel de estrés puede contribuir a que se produzca un ambiente tenso. Por ese motivo, no es de extrañar que el estrés ande detrás de un elevado número de conflictos en el hogar.
Si aprendéis a gestionar el estrés, lograréis mejorar las relaciones y el ambiente de vuestro hogar. Como consecuencia, aumentarán las oportunidades para disfrutar en familia del día a día, así como para alcanzar la relajación física y mental adecuadas.
La buena noticia es que hay diversas actividades que podéis realizar en familia para reducir el estrés y que os ayudarán a mejorar el bienestar familiar. A continuación, os mostramos algunas de ellas:
Mantener el orden
Algo tan sencillo y crucial como mantener el orden en casa os ayudará a crear un ambiente propicio para la relajación, un paso fundamental para comenzar a combatir el estrés.
Para ello, debéis evitar el desorden o delimitarlo, puesto que la falta de organización es capaz de provocar un aumento en los niveles de cortisol, una hormona relacionada con la generación del estrés. Podéis escuchar la música que más os guste mientras recogéis para hacerlo más ameno.
Recuerda, además, que es muy importante que todos los miembros de la familia sigáis una dieta equilibrada y saludable que os aporte la energía necesaria, así como descansar lo suficiente, procurando dormir entre 7 y 9 horas cada noche.
Realizar ejercicio
La práctica de ejercicio es capaz de actuar como un potente calmante para el estrés. Esto es debido al incremento de la producción de endorfinas que se origina cuando realizamos ejercicio, una sustancia elaborada por nuestro propio organismo que se encarga de estimular las áreas cerebrales que generan placer, regalándonos una agradable sensación de satisfacción.
Por otro lado, el ejercicio también contribuye a aumentar la confianza en uno mismo, a relajarse y disminuir los síntomas que se identifican con el estrés y la ansiedad. Por ejemplo, ayuda a mejorar la calidad del sueño, facilitando un despertar más enérgico.
Y lo mejor de todo es que existe un amplio abanico de posibilidades para practicar ejercicio en familia y reducir el estrés. Desde ir a montar en bicicleta o en patines, hasta hacer senderismo a través de rutas sencillas con paisajes preciosos, montar a caballo o aprender a hacer surf. Simplemente tendréis que poneros de acuerdo y encontrar la actividad que más feliz os haga mientras la realizáis todos juntos, en familia.
Igualmente, podéis aprovechar para realizar en familia cualquier actividad que implique salir de casa, aunque no sea exactamente la práctica de ejercicio, como ir al cine a ver esa película que tanto esperábais, ir a comer fuera por una fecha especial o simplemente por visitar ese restaurante que os gusta tanto, o ver ese espectáculo tan popular que ha llegado a la ciudad.
Diversión en familia
Al entretenerte y pasarlo bien jugando puedes lograr un gran efecto relajante en la mente. Podéis jugar con los niños, si son pequeños, con sus propios juguetes y despertar vuestra creatividad juntos, a la vez que alejáis los pensamientos que puedan ocasionaros estrés.
Si vuestros hijos son algo más mayores, quizás prefiráis los juegos de mesa o juegos interactivos que impliquen seguir divertidas coreografías o cantar como un verdadero artista. Hay una gran variedad de juegos con los que pasarlo genial o dejar volar la imaginación.
Además, debes saber que reír a carcajadas genera una enorme sensación de bienestar, aportando diversos beneficios, como la renovación de energías, la mejora del ritmo cardíaco, conseguir una mayor irrigación sanguínea o incluso lucir una piel más luminosa.
Para disminuir el nivel de estrés en familia, podríais sumarle a los juegos ver alguna película divertida, contar o escuchar chistes o haceros cosquillas. Notaréis como el estrés comienza a reducirse... ¡cómo por arte de magia!
Practicar juntos la relajación
Aprender técnicas de relajación puede ser conveniente en los casos en los que el estrés haya alcanzado cotas muy altas. En la práctica de dichas técnicas podréis encontrar un gran aliado a la hora de lidiar con el estrés, ya que ayudan a reducir el ritmo cardíaco y disminuir la presión sanguínea.
Existen diferentes tipos de técnicas, desde respiraciones profundas o mindfulness, hasta la práctica de yoga o taichi. Seguro que encontráis la que mejor se adapte a vuestro modo de vida y a vuestra necesidad de relajación.
Relajación en los baños termales
Podréis olvidaros de todo el estrés y alcanzar la máxima relajación, tanto a nivel mental como físico, todos juntos en familia gracias a las propiedades beneficiosas del contraste de temperaturas de los baños. A través de los baños termales podréis vivir un momento inolvidable de desconexión, calmar tensiones y reconstituir energías.
En AIRE Ancient Baths Vallromanes (a 30 km. de Barcelona) es posible gracias a nuestros baños termales, inspirados en la tradición de antiguas civilizaciones como la romana, griega u otomana.
En este centro AIRE, situado en plena naturaleza, os veréis envueltos en una mágica atmósfera a la tenue luz de las velas mientras hacéis un recorrido libre por los baños a distintas temperaturas (caliente, templada y fría), el Laconicum (baño de vapor), el Balneum (de mil chorros) y el glorioso Flotarium (baño de sal).
Podrán participar en la Experiencia AIRE los pequeños de 4 años en adelante, bajo previa petición, los sábados y domingos de 9:00 a 10:00 horas. A partir de los 16 años pueden entrar en horario regular. Durante estos 60 minutos, los peques únicamente pueden realizar los baños y siempre bajo el control de sus padres.
La agradable y relajante experiencia en los baños termales se completa, en el caso de los adultos, con una selección de fantásticos masajes y rituales exclusivos.