Masaje ayurvédico: técnicas y principios hindúes

El masaje ayurvédico es una técnica ancestral con la que podemos sentirnos realmente bien gracias a que trata de volver a equilibrar nuestras energías para poder paliar los males que nos afecten.

A continuación, te mostramos algunas de las claves de esta milenaria técnica india:

¿Qué es el Ayurveda?

El Ayurveda es originario de la India y consiste en un sistema de medicina tradicional con más de 5.000 años de antigüedad. En términos sánscritos, Ayurveda quiere decir ciencia o conocimiento de la vida.

Su objetivo es el de alcanzar el equilibrio entre la mente, el espíritu y el cuerpo con técnicas naturales como la meditación, el ejercicio físico o la alimentación, que más que curar buscan prevenir enfermedades.

Otra de estas técnicas es el masaje ayurvédico, muy ligado a los principios generales del Ayurveda, que busca corregir el desequilibrio de nuestras energías usando aceites esenciales y aplicando presión, así como otros movimientos en zonas concretas del cuerpo.

Lo fascinante del Ayurveda es que se centra en descubrir qué tipo de masaje es el ideal para cada persona, ya que existen diferentes tipos de energías en nuestro cuerpo. Para ello, tiene en cuenta varias características del hombre o mujer que vaya a hacerse el masaje, como el tipo de piel, la digestión, el metabolismo o el sueño, entre otros.

Los principios del Ayurveda

El Ayurveda ofrece un diagnóstico global que no se centra solamente en los síntomas y la enfermedad, sino que considera diversos aspectos de la vida del paciente como, por ejemplo, sus costumbres y hábitos diarios, sus pensamientos o cómo siente y padece la dolencia. 

Igualmente, el Ayurveda concibe al ser humano como un todo formado por cuerpo, mente y espíritu. Por este motivo, valora la manera en la que nuestros pensamientos y emociones impactan en los procesos fisiológicos de nuestro organismo.

Además, el Ayurveda tiene otros dos principios fundamentales:

Los cinco elementos

Para este sistema medicinal, todo ser y materia que exista en el universo está compuesto, incluyéndonos a nosotros mismos, por cinco elementos (en diferentes proporciones): tierra, agua, fuego, aire y espacio. En general, suelen predominar uno o dos de ellos, haciéndonos únicos.

Los Doshas

En función de la cantidad que las personas tenemos de cada uno de esos cinco elementos, el Ayurveda nos clasifica en tres categorías o doshas:

  • Vata: representa la energía en movimiento y la creación de cosas.
  • Pitta: se relaciona con la transformación y los cambios.
  • Kapha: actúa como un elemento cohesionador.

Las enfermedades se generarían como consecuencia de un desequilibrio de los doshas por lo que, para poder recuperar la salud, la medicina que se aplique tendrá que equilibrarlos de nuevo.

Masaje ayurvédico

Para averiguar qué doshas predominan y cuáles se deben equilibrar en la persona que se va a hacer el masaje, el terapeuta o médico ayurvédico le hará varias preguntas sobre sus hábitos, actitudes, atributos personales y físicos.

Tras este análisis, el terapeuta usará el tipo de aceite, presión e intensidad que la persona requiera.

Existen distintos tipos de masajes ayurvédicos que, si bien pueden aliviar dolencias, su función es fundamentalmente preventiva. Entre algunos de los masajes del Ayurveda más conocidos se encuentran los siguientes:

Masaje abhyanga

Dentro del Ayurveda el masaje abhyanga probablemente sea el más conocido. Además, podemos decir que es considerado el masaje tradicional de la India.

Se realiza en todo el cuerpo con aceites esenciales y consiste en friccionar los tejidos y separarlos. De esta forma, se eliminarían los posibles bloqueos, aliviando la fatiga muscular.

Este masaje ayurvédico también contribuye a favorecer la circulación, elimina toxinas, suaviza e ilumina la piel, mitiga el estrés y mejora el descanso.

Masaje pinda swedana

Para llevar a cabo este masaje se utilizan pindas que son hervidas con leche o en decocciones de plantas. Las pindas son saquitos que contienen hierbas en polvo y en algunas ocasiones arroz. Con ellas se masajean las zonas del cuerpo a tratar, siendo su principal propósito que la persona sude, con lo que se logra una gran eliminación de toxinas.

Mantener el calor en el cuerpo es esencial para que el masaje sea efectivo. Suele recomendarse para tratar o prevenir dolencias como el reúma, la artrosis o la gota.

Masaje chavitti

Este singular masaje ayurvédico, muy apreciado por los deportistas, se realiza nada más y nada menos que con los pies.

Con el masaje chavitti se logra mejorar el tono muscular, por lo que a su vez contribuye a prevenir distintos tipos de lesiones como las distensiones, esguinces o torceduras.

Masaje shirodhara

En este masaje ayurvédico se deja caer un hilo de aceite medicado de forma lenta, delicada y constante en la zona del entrecejo.

El masaje shiro dhara es muy agradable y suele hacerse tras haber recibido un masaje previo en la cabeza o en todo el cuerpo. Se usa comúnmente para mejorar problemas relacionados con el sueño o la memoria, así como con la mente en general

También ayuda a combatir otros males como el estrés, la depresión, la ansiedad o la epilepsia.

Masaje padabhyanga

Este tipo de masaje cuenta con un puesto muy especial dentro del Ayurveda. Consiste en un masaje de pies donde se trabajan los puntos marma o de energía vital. Al actuar sobre dichos puntos se consigue influir positivamente en distintos aspectos de la salud, ayudando a equilibrar los doshas.

Es habitual realizar el masaje padabhyanga, que resulta tan placentero y satisfactorio, antes de ir a dormir. Además, lo ideal de este masaje es que te lo puedes hacer cada día.

Este masaje ayurvédico está especialmente indicado para atenuar el dolor y la tensión muscular tanto de las piernas como de los pies y mejorar la circulación sanguínea, así como para apaciguar la mente y el sistema nervioso.

Por otro lado, ayuda a disminuir el estrés, lucha contra el insomnio promoviendo la calidad del sueño, favorece el flujo de prana o energía vital y mejora la salud de la piel.

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